¿Por qué deberías limpiar tu ordenador?

Si no se realizan tareas de mantenimiento regularmente, con el paso del tiempo, todos los usuarios tienden a perder velocidad y eficacia. Esta lentitud puede ser muy molesta, pero no sólo pierdes el tiempo, sino también la paciencia.

Si notas que tu portátil o tu equipo de sobremesa funciona cada vez más lento, una cosa es segura: alguna cosa no va bien. Si no se toman medidas, la lentitud será mayor.

A continuación, indicamos las principales causas por las que tu ordenador funciona peor y algunos consejos para evitarlo. En caso de que estas recomendaciones no sean suficientes, puedes comprar un nuevo equipo, o bien recurrir a un puesto de trabajo profesional: es un servicio rápido y económico que proporciona excelentes resultados.

- Exceso de temperatura. Los ordenadores pueden escalfarse por diferentes motivos, por ejemplo, por mal funcionamiento de los ventiladores, por saturación de procesos o por falta de red de algunos peces internos, entre otros. Cuando un equipo alcanza temperaturas elevadas sacrifica el rendimiento para compensar el exceso de calor. Por eso es muy importante revisar los componentes internos con regularidad para asegurarse de que están llenos de pólvora y comprobar si hay alguna pieza desgastada que siga siendo necesaria sustituir.

- software desactualizado. Si tienes versiones anteriores, ya sea de Windows o de los controladores, es posible que afecte negativamente al rendimiento de tu ordenador. Para evitarlo, es importante realizar actualizaciones periódicas para garantizar el óptimo funcionamiento de los programas y dispositivos.

- infectado por malware, tanto si es trata de virus, troyanos o cualquier otra aplicación maliciosa. En estos casos, se debe realizar un escaneo con un buen antivirus para detectar y eliminar todos estos programas que alientan tu sistema.

- Escritorio cargado de elementos. Reducir al mínimo realmente necesario el número de alfombras y accesos directos del escritorio del ordenador contribuye al hecho de que sigue siendo más rápido, sobre todo en el momento del arranque. Si tu escritor está lleno de piedras, hazlo en otras alfombras o escúrrelas.

- Poco espacio en el disco duro. Es una de las principales causas de ralentización del sistema. Las soluciones son, puedes borrar lo que no necesitas, ampliar su capacidad o recurrir a discos externos.

- ejecución simultánea de procesos masivos. Es muy habitual que, con el tiempo, se instalen determinados programas (o juegos) que, aunque sólo se utilicen una vez, se han olvidado de desinstalar. Estos programas que no necesitan, no sólo ocupan espacio en el disco duro, sino que también ocupan memoria RAM y pueden hacerlo del procesador. Todo ello contribuye a reducir tu nivel de exigencia. Por eso, de vez en cuando es importante hacer un repaso de los programas instalados y eliminar los que ya son necesarios.

- ¿Es el ordenador o es Internet el que se presta? A veces parece que es el ordenador el que no funciona bien, pero es Internet. Por eso es un buen truco reiniciar el router de tanto en tanto y hacer comprobaciones periódicas de la velocidad de Internet y, en caso necesario, reportar la incidencia al proveedor para que solucione el problema.

¿Cómo prevenir el descenso de velocidad?

Hay algunas cosas que se pueden desarrollar para evitar que tu ordenador pierda velocidad con el paso del tiempo, por ejemplo:

- Reiniciar el equipo regularmente. Así no se sobrecoge la memoria RAM con programas, procesos o con información innecesaria. No dejéis el ordenador encajado durante días o semanas, es mejor apagarlo cada vez.

- Llegar a los misats abans de fer clic. Sobre todo, en el caso de los errores de error (para saber lo que produce un error en tu sistema y solucionar lo que tiene efectos negativos) y en los errores emergentes de las webs (si vas con poca cura puedes aceptar que se instale el software publicitario o fines y todo malintencionado). Preste especial atención a la aceptación de cookies.

- Actualizar el equipo regularmente. Hacer realidad las actualizaciones que propone Windows por ahora puede ser un desperdicio de tiempo que provoca que se descargue e instale, pero hay que hacerlo cada 3-4 meses como mínimo, ya que la mayoría de ellas son necesarias y contribuyen a optimizar el funcionamiento del sistema.

Limitar al mínimo imprescindible el número de programas que se inician automáticamente al arrancar el ordenador. Así, tu portátil o equipo de sobrecarga se iniciarán con mayor rapidez.