Cosas que hacer antes de comprar un ordenador
5 consejos antes de comprar un nuevo portátil
Ya estamos casi en 2019, pero comprar un ordenador sigue siendo algo que hay que hacer con cierto cuidado. La inversión sigue siendo importante, aunque ahora la mayoría de los PC cuestan menos que los smartphones y se cambian con mucha menos frecuencia, pero seguimos trabajando durante horas con el ordenador y por eso es fundamental que nos dé los menores problemas posibles, facilitándonos cada tarea y ahorrándonos tiempo siempre que sea posible. Pero, ¿cómo se elige un ordenador hoy en día? La mayoría de la gente sólo piensa en dos cosas: el coste y el diseño, pero quizá deberíamos profundizar un poco más. He aquí algunas reflexiones sobre los principales aspectos a valorar.
1. Oh, ¡no! ¿Otra vez Windows contra MacOS? Sí, pero Linux también, aunque....
Sí, como decíamos estamos ya en 2019, pero la primera consideración a hacer empieza por el sistema operativo, igual que hace 20 años. Si la cartera lo permite, ¿es mejor hacerse con un ordenador Windows o MacOS? ¿Y por qué no considerar un outsider como Linux? La respuesta principal está en el uso que le vayamos a dar. ¿También queremos jugar en el PC? Windows es una elección casi obligatoria. Claro que existe la posibilidad de emular el sistema operativo en otras opciones, pero no es lo mismo. ¿Nos gusta tener mucho software a nuestra disposición? Windows sigue estando a años luz de los otros dos en cuanto a número de aplicaciones. ¿Nos gusta tener software libre?
La elección sigue recayendo en la plataforma Windows, pero Linux empieza a hacer acto de presencia: la disponibilidad de proyectos abiertos para el sistema operativo libre ha crecido enormemente y rivaliza de cerca con la de Windows (que, sin embargo, tiene un importante historial). ¿Son músicos? Quizá éste sea el único caso en el que un Mac tiene ventaja en Software. La verdad, sin embargo, es que es difícil que haya "grandes públicos" para todos los sistemas operativos: un geek utilizará tanto Windows como Linux, sobre todo si trabaja en el sector tecnológico; un artista, desde fotógrafo a ilustrador pasando por músico, encuentra muy a menudo irresistible el diseño de producto y la transversalidad de Software de los ordenadores Apple; un usuario que sólo utilice un PC para trabajar en movilidad con aplicaciones ofimáticas se decantará casi seguro por Windows porque es la mezcla adecuada de sencillez de manejo tanto para el usuario como para el responsable informático. A la hora de elegir, recuerde lo que decía Bill Gates: la magia está en el Software, y piense detenidamente qué va a utilizar y cuánto le costará hacerlo.
2. Un kilo de RAM, dos de HDD, unos tornillos y un teclado mariposa, por favor. Aunque las fichas técnicas en el punto de venta son cada vez más pequeñas, para hacernos comprar un ordenador basándonos en su diseño y no en lo que lleva dentro, todavía hay un par de detalles que no podemos pasar por alto. El primero es el disco duro. Sea cual sea la configuración que estés considerando, da una gran ventaja a los que tienen SSD, es decir, una unidad de estado sólido. La velocidad de lectura y escritura de datos es increíblemente rápida en comparación con las unidades de disco giratorio tradicionales, son más resistentes a los golpes y el ordenador será mucho más rápido en todo lo que haga. Por lo general, la capacidad es mucho menor, pero hay que hacer concesiones. No necesitas un terabyte de disco en un portátil (como mucho usarás un disco externo o incluso una memoria USB, después de hacer una copia de seguridad en un lugar más seguro), mientras que la velocidad y la capacidad de respuesta del ordenador es algo a lo que no puedes renunciar. La RAM también sigue siendo un elemento muy importante.
No bajes de 8 gigas. 4 puede ser suficiente, pero el sistema operativo tendrá problemas de vez en cuando. Con al menos 8 estarás bien por un tiempo. Por último, el procesador: todo lo que no sea Intel I3, i5, i7 o AMD Ryzen te ralentizará. Menos notable en la serie Pentium, más notable en la serie Celeron, pero aún presente. Si puedes, elige uno de los procesadores de la serie I o Ryzen.
3. Un momento: ¿qué demonios es un Ryzen?
Tal vez a los menos observadores se les haya pasado por alto, pero AMD, el viejo competidor de Intel en el sector de los microprocesadores informáticos, ha vuelto a la primera línea del mercado tras crear una serie de procesadores de alto rendimiento. Esta serie se llama Ryzen y rinde muy bien tanto en términos de velocidad como de precio. Por lo general, una solución AMD Ryzen que cuesta lo mismo que una solución Intel de la serie I tiene "mejores" características secundarias. Por desgracia, todavía no hay muchos portátiles que utilicen procesadores Ryzen, pero si te encuentras ante uno de estos, haz que sea uno a tener en cuenta.
4. No todos los ordenadores pueden ser igual de seguros
Si el ordenador que vamos a comprar lo vamos a utilizar para trabajar, es bueno que tenga algunas características de seguridad que lo hagan un poco más seguro que los ordenadores de "primer precio". Empecemos por una consideración importante: la elección del sistema operativo no nos hace estar a salvo de nada. La mayoría de los problemas de seguridad actuales son independientes de la plataforma y, por cierto, este mes hay un malware para mac entre los 10 más extendidos según un estudio de WatchGuard. Así que hay que pensar en medidas más concretas como elegir siempre la versión Pro de Windows 10, por ejemplo, que incorpora una serie de medidas de defensa más robustas, como el cifrado de disco por hardware activado por defecto o controles de red más avanzados. Además, muchos fabricantes tienen programas específicos para ordenadores de empresa que son muy útiles aunque poco conocidos. Lenovo tiene un sistema que garantiza que el firmware instalado en la máquina es el mismo que se instaló en fábrica. De esta forma, quien intente comprometer una máquina durante el transporte lo tendrá mucho más complicado.
5. Sí, pero ¿qué forma le doy?
Por último, llegamos a una consideración cada vez más discutida: ¿mejor un portátil tradicional o un 2 en 1? ¿Y por qué no una tableta? Aquí la respuesta dista mucho de ser universal porque entran en juego variables muy personales. Todos estamos familiarizados con los portátiles tradicionales y conocemos sus limitaciones, pero ¿qué pasa con los 2 en 1? ¿Y las tabletas "puras"? Los 2 en 1 tienen una gran ventaja: el lápiz. Resulta muy práctico en muchas ocasiones, sobre todo a la hora de tomar notas y en situaciones de extrema movilidad. A diferencia de las tabletas puras, tienen un sistema operativo Windows nativo, pero conservan muy buena autonomía y ligereza. Por otro lado, son especialmente incómodos de usar sobre el regazo, como cuando se está sentado en una silla en la estación o el aeropuerto, a menos que se tengan las piernas muy largas. En los aviones, en cambio, tienen una ventaja: además del uso con bolígrafo, la punta muy adelantada del teclado genera una huella muy pequeña, lo que significa que caben cómodamente en el espacio entre asientos.
¿Y las tabletas? Las tabletas siguen siendo un poco toscas. Estupendas si sólo necesitas utilizar aplicaciones de productividad y ver algunas películas, cuando las cosas se ponen un poco "más difíciles", muestran todas sus limitaciones, sobre todo en términos de ergonomía y disponibilidad de programas. Piénsatelo dos veces antes de elegir uno para sustituir a tu portátil.
FUENTE: https://www.ilsole24ore.com/art/i-5-consigli-prima-comprare-computer-portatile-nuovo--AEnUyY2G
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